Hoy en la guarde son Carnavales. El tema: Luna, uno de los muchos cuentos que tienen allí.
Hace un par de semanas que nos lo comunicaron. En el casillero de cada peque habían dejado uno de los personajes que aparecen en este cuento. La idea era pintarlo en una camiseta blanca un par de tallas más grande para llevarla encima del abrigo ya que a media mañana tienen pensado salir a la plaza del pueblo a celebrar la fiesta de los Carnavales.
Ni me preguntéis, porque ni idea del cuento. -Sí lo se, he de reciclarme y salir de «Los 3 cerditos», «Caperucita roja» o el «Soldadito de Plomo». Imaginé que tratándose de «Luna» sería algo facilillo a dibujar. Una luna, por ejemplo, o un par de estrellas como mucho :-), vamos que ya me había hecho a la idea.
¿Mi sorpresa?, pues el lunes pasado al recoger a Ainara y encontrar en su taquilla el personaje que le había tocado. -¡¡¡Un RUISEÑOR, señores, un RUISEÑOR!!! Mi cara se quedó a cuadros, todo un poema acorde con el cuento. Pero ya no sólo eso si no que el pajarito en sí era feo, feo, feo, feo de narices. -¿Un Ruiseñor?, ¿la Luna y un Ruiseñor?, ¿¡pero qué cuento era ese!?
Julia, la profesora, tras verme la cara entre risas me dijo: – Que sepas que no ha sido a propósito, los he ido colocando en los casilleros según los tenía en la mano. Además a ti se te da muy bien dibujar, te será fácil.
¿Fácil? ¡Daba igual! Era horrible. Era raro, feo, con un pico extraño. No lo pude evitar y cuando se dio la vuelta me recorrí todos los casilleros de los demás niños: una luna, otra luna, más lunas, -¡mira un sol!, un corazón, otro sol, cinco lunas más, -¡ayyyyy un caracol! ¡Ya nos podía haber tocado a nosotras, Ainara! :-), dos lunas más, un girasol, más lunas y… el Ruiseñor 😦
Tras doblar el folio con el personaje que nos habían dejado, la pregunté – ¿Puedo darle mi toque?, ¿ya sabes, tunearlo un poquillo? –Sí, sí claro, como tú lo veas.
Pues dicho y hecho, el Ruiseñor no es que se parezca mucho al del personaje, pero bueno como son los carnavales yo le he dado un toque de color. Vamos que lo he disfrazado, de Payasete, jejejejeje. Y me gusta. No me ha quedado tan mal y estoy pensando que mi próxima aventura…….. ¡¡¡TACHAN!!! ¡Diseñadora de ropa para peques! ¿por qué no?, imaginación no me falta :-). Así que ya os adelanto que veréis algún que otro modeli más por aquí jejejeje.
¡¡FELIZ CARNAVAL!! Y si tenéis peques y posibilidad de haceros con el cuento os lo recomiendo, ayer me explicaba otra de las profes, Magali, tras preguntarla, que se puede leer, bien: cantádolo, o en forma de poema. Y he de deciros que llevo desde ayer con la cancioncilla sonando en mi cabeza. Si ya hasta veo mono el ruiseñor ;-), pero me sigo quedando con el mío 🙂